Muro de Berlín
El Muro de Berlín (en alemán: Berliner Mauer), denominado oficialmente por la socialista República Democrática Alemana (RDA) como Muro de
Protección Antifascista (Antifaschistischer Schutzwall) y también
apodado por parte de la opinión pública occidental como Muro de la
vergüenza (Schandmauer),1 fue parte de la frontera interalemana desde el 13 de agosto de 1961 hasta el 9 de noviembre de 1989 y separó la zona de la ciudad berlinesa bajo control de la República Federal de Alemania (RFA), Berlín Oeste, de la capital de la RDA entre esos años.2 Berlín Oeste o Berlín Occidental era un enclave perteneciente al espacio
económico de la RFA en medio del territorio de la RDA y, legalmente, no formaba
parte de la RFA.
El Bloque del Este dominado por los soviéticos sostenía que el muro fue levantado para
proteger a su población de elementos fascistas que conspiraban para evitar la
voluntad popular de construir un Estado socialista en Alemania del Este. En la
práctica, el muro sirvió para impedir la emigración masiva que marcó a Alemania
del Este y al bloque comunista luego de la Segunda Guerra Mundial.
Un muro de 45 kilómetros
dividía la ciudad de Berlín en dos, mientras que otros 115 kilómetros rodeaban su parte oeste
separándola de la RDA. Es decir, el Muro constituía la frontera estatal
entre la RDA y el enclave Berlín Oeste. Fue uno de los símbolos más conocidos
de la Guerra Fría y de la separación de Alemania.3
Muchas personas murieron en el
intento de superar la dura vigilancia de los guardias fronterizos de la RDA
cuando se dirigían al sector occidental. El número exacto no se conoce. La
Fiscalía de Berlín considera que el saldo fue de 270 personas, incluyendo 33
que fallecieron como consecuencia de la detonación de minas. Por su parte el Centro de Estudios Históricos de Potsdam estima en 125 la cifra total
de muertos en la zona del muro.